Realidad Virtual y Tratamiento Psicológico: Introducción

Lo que hace única una experiencia virtual es que la persona tiene la ilusión de “estar” en el espacio generado por el ordenador, interactuando con los objetos de ese mundo virtual. Esta propiedad de la RV, que se denomina la sensación de presencia, es lo que la hace tan atractiva para su uso en Psicología Clínica. La RV (Realidad Virtual) supone un cambio cualitativo con respecto a otras tecnologías, como la televisión o la pantalla de un ordenador, ya que permite una inmersión total en una simulación de la realidad donde el usuario puede interactuar con el mundo virtual, de una forma similar a como interactúa con el mundo real.

La primera aplicación de la realidad virtual en Psicología Clínica se centró en el tratamiento de la acrofobia. El primer caso fue un paciente con acrofobia que superaba su miedo a las alturas tras exponerse a un escenario virtual que reproducía situaciones acrofóbicas. El uso de la RV se ha ampliado también a otros trastornos de ansiedad como la fobia a volar, la claustrofobia, la fobia a conducir o la fobia social (mediante la técnica de exposición virtual); también se está empezando a utilizar en otro tipo de trastornos como los de la conducta alimentaria o el autismo (Strickland, 1997).

Se podrá pensar que esto no es muy nuevo, ya que tradicionalmente en terapia para muchas de estas “simulaciones de la realidad” se ha recurrido a la imaginación del paciente o a procedimientos como el juego de roles. Sin embargo, una de las grandes ventajas de esta nueva  “simulación cibernética” es que cada uno de los elementos, y eventos, que suceden en la misma están bajo el control total del terapeuta.

Por ejemplo, para el tratamiento mediante la técnica de exposición de la  fobia a volar podemos disponer de un simulador de vuelo, un avión virtual con distintas opciones: vuelos de día o de noche, buen tiempo o tormenta, vuelo con turbulencias o sin turbulencias, etc.

Además, la RV permite reproducir la situación temida tantas veces como se desee, sin necesidad de esperar a que se vuelva a producir en la vida real. Esto desde luego puede mejorar el sobre-aprendizaje y las expectativas de autoeficacia de nuestro paciente/cliente.

Una línea de investigación muy novedosa, en el campo de la RV, es el uso de la RealidadAumentada (RA). La RA consiste en incorporar elementos virtuales en el mundo real. El juicio de realidad respecto a esos objetos virtuales es muy grande dado que se encuentran rodeados, no de un mundo virtual, sino del mundo real.

 Parece, por tanto, que la Realidad Virtual puede ayudarnos a mejorar la calidad de nuestros tratamientos, mejorar muchas de las técnicas de las que disponemos en la Psicología Clínica; mejorar, por tanto, la calidad de vida de nuestros pacientes y convertir la Psicología en una herramienta cada vez más eficaz y más precisa para el tratamiento psicológico.

(Tania Berzosa)